Es una receta muy sencilla que garantiza unos resultados satisfactorios hasta para los cocineros de cannabis novatos. Sin embargo, hay que entender que a menos que se descarboxile el cannabis (“se caliente”) en algún momento de la receta, no será psicoactivo al consumirlo.
La descarboxilación es el proceso de calentar el cannabis para que el THCA crudo se convierta en THC psicoactivo. Esto ocurre de manera natural cuando se fuma o vaporiza el cannabis, pero hay que hacerlo manualmente cuando se preparan recetas en las que no se usa o apenas se usa la cocción.
Para decarboxilar cannabis, pon la temperatura del horno lo más cerca que puedas de 115 grados centígrados, y coloca en él tu cannabis durante al menos 30 minutos. Este activará sin duda el THC y hará posible que el brote se comporte. Puede que huelas el cannabis mientras se cocina, pero no te preocupes – los cannabinoides no se están estropeando.
Para hacer chocolate de cannabis vas a necesitar:
- 3-5 gramos de cannabis finamente molido (modificar según se desee)
- 100 gramos de chocolate negro (tableta normal o pepitas de chocolate)
- Bol de vidrio.
- Cazuela
- Molde de Chocolate
El método
1. Mientras se descarboxila el cannabis (ver más arriba), puedes empezar a derretir el chocolate.
Para hacerlo con cuidado y sin quemarlo, lo mejor es fundir el chocolate con vapor. No te preocupes, es muy fácil de improvisar:
Coloca el recipiente de cristal encima de la cazuela, asegurándote de que no toque el agua. Para lograr esto, el bol de cristal debe ser lo suficientemente grande como para reposar en el borde de la cazuela. Esto hará que el chocolate se caliente suavemente con el vapor, no por contacto directo con el agua hirviendo.
2. Pon el chocolate en el recipiente de cristal y deja que se derrita, removiendo de vez en cuando.
3. Mezcla el cannabis decarboxilado con el chocolate derretido. Asegúrate de que los brotes estén triturados lo más fino que puedas.
4. Una vez que esté todo bien mezclado, vierte el chocolate líquido en los moldes para que se endurezca. Si no tienes moldes, también sirven las bandejas para hacer hielo.
5. Cuando el molde esté lleno, levántalo con cuidado de la mesa, a unos 10 cm, y déjalo caer de nuevo. Esto ayudará a expulsar las burbujas de aire que quedan atrapadas en el chocolate.
6. Pon los moldes en la nevera hasta que se endurezcan.
Ya has fabricado con éxito chocolate de cannabis, que se puede comer así, o utilizarlo en otras recetas. Como siempre, con todos los comestibles, modifica la cantidad de cannabis según tus gustos, y espera al menos 45 minutos a que aparezcan los efectos.
Fuente: Zamnesia
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