Una de las peores tragedias que le puede suceder a un cultivador de cannabis, es que debido a un despiste o a las inclemencias del tiempo, acaben mojados los cogollos. No obstante, tiene solución. Eso sí, hay que actuar con paciencia y seguir el protocolo de seguridad para que no aparezca moho y se acabe por confirmar el desastre.
El factor clave para salvar la marihuana mojada y conseguir fumarla, es la paciencia. Posiblemente no será cuestión de dos o tres días, sino que habrá que esperar algo más de tiempo para que los cogollos se sequen.
Lo primero que hay que tener en cuenta en caso de que la marihuana se moje y esté húmeda, es evitar a toda costa la aparición de moho. En caso de que aparezca tan indeseado visitante durante el proceso de secado, entonces podremos declarar oficialmente que ese cannabis ha muerto.
Hay que tener presente que fumar moho es pernicioso para nuestra salud, así que mejor descartarlo por completo.
También es conveniente descartar la marihuana si ha caído al agua del mar o a una piscina. Esto es así porque no es nada aconsejable fumar o consumir cannabis con la sal que contiene el agua del mar, ni mucho menos con los productos químicos con los que se trata el agua que hay en las piscinas. De modo que, para evitar males mayores, mejor olvidarnos del proceso de secado.
Una vez apuntadas esas dos premisas, sumamente relevantes para evitar a toda costa algún problema de salud grave, es el momento de repasar los métodos que existen para secar los cogollos mojados. En este caso, te daremos los métodos del papel y del arroz.
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Método del papel
Antes de nada lo que debemos hacer una vez que se moje nuestra marihuana es envolverla en papel de cocina o en una bolsa de papel marrón. Si bien es cierto que no son del todo comunes, hay muchos establecimientos de comida rápida que las reparten en sus envíos.
Ya optemos por una u otra alternativa, tendremos que colocar el cannabis en un lugar oscuro y seco. En este proceso, uno de los pasos más importante es cerciorarnos de que en ese lugar o bien hay cierto flujo de aire o bien la provocamos nosotros, ya sea con un humidificador o con un ventilador, para que así haya cierta corriente.
Una vez cumplidos todos estos pasos, dejaremos reposar el cannabis en ese lugar durante dos horas. Transcurrido ese tiempo y durante los días que sea preciso, nos tocará reemplazar o bien el papel de cocina o bien la bolsa que hayamos utilizado y voltear la marihuana.
Método del arroz
Todos sabemos la historia de algún conocido que mete en un tarro de arroz su teléfono móvil cuando este se cae al agua. Hasta hace un tiempo, esto era bastante habitual. Pues bien, con el cannabis ocurre lo mismo. Si tenemos cogollos mojados, podremos optar por ponerlo en un tarro lleno de arroz. Dejaremos el recipiente abierto por un día en un lugar, como ocurría con el anterior método, en el que haya ventilación para así prevenir el moho.
Al cabo del día, revisaremos el estado en que se encuentra la marihuana. Así en el momento en que comprobemos al tacto que se encuentra menos húmeda, entonces tendremos que volver al método anterior y, una vez desmenuzada, utilizar papel de cocina para envolverla, con el propósito de que se elimine por completo la humedad residual que pueda haber.
Para completar este último paso solamente serán necesarias unas horas. Eso sí, en caso de que comprobemos que la marihuana no está del todo seca, entonces tendremos que prolongar más este proceso de secado.
Piensa antes de actuar
Podríamos pensar que hay formas más rápidas de conseguir secar los cogollos mojados, ya sea con un secador del pelo, con un microondas, con un horno a baja temperatura o incluso poniéndola solamente al sol. Aunque son alternativas y consigamos secar la marihuana, esta perderá sus propiedades y no la recuperaremos con todos sus cualidades.
Si por ejemplo, utilizamos una lámpara, como algunos hacen, lo que acabaremos por provocar es que los tricomas sufran desperfectos y se pierdan los niveles de THC, CBD u otros cannabinoides de los que venga bien cargada esa variedad. Además, que a la hora de fumarla será menos agradable.
Por todo ello, cuando la marihuana se moje lo más idóneo para evitar males mayores es tener paciencia y poner en práctica alguno de los dos métodos que hemos explicado.