
Desde la comunidad cannabica, se genera una lucha constante contra una cantidad de códigos, mitos y estereotipos que han marcado en el tiempo a quienes consumimos marihuana de manera recreativa o medicinal, existen un montón de perjuicios frente a los que debemos lidiar día a día. En principio ser un Ganyero Citadino, no es sinónimo de ser un perdedor o perdedora, incapaz de obtener un empleo o imposibilitado de estudiar, todo porque según las explicaciones mitológicas urbanas nos señalan como eso. No obstante, me encuentro, todos los días con ganyeros citadinos que trabajan, estudian, unos trabajos de alto nivel, otros medios o bajo, al mismo tiempo están los que estudian y como dicen sus madres sacan buenas calificaciones.
También nos dicen, en el caso de las mujeres que si fumamos marihuana, nos prostituimos, cosa que es falsa, porque además de calificarnos de manera negativa y con un trabajo que le guste o no a la sociedad, existe y es rentable para muchas, nos someten al látigo, de los estereotipos de las damas “buenas” y “malas”. Las ganyeras citadinas, somos, eso ganyeras que trabajamos, estudiamos, conversamos, caminamos, creamos, compartimos y levantamos la bandera del cannabis legalizado y despenalizado. Este es un mito, demasiado frágil.
Esta el mito del ganyero sucio, desordenado, mal hablado y hasta tonto. Pues, nada más alejado de la realidad que este estereotipo, ya que, como he señalado más arriba, estamos diseminados en todos los estratos sociales, laborales y económicos, incluso políticos por lo que marcar este tipo de argumentos resulta ilógico.
Andamos todo el día fumados(as) y no distinguimos lo que hacemos, este estereotipo creo es uno de los peores argumentados, si bien estamos fumados o con alguna ingesta, ello no incide en los compromisos que debemos cumplir en los espacios que nos correspondan. Nuestro consumo es con responsabilidad. Por tanto, aun estando fumadas(os) accionamos en la creación, producción y por supuesto siempre apostando a la destrucción de este sistema babilónico en el que tenemos que sobrevivir.
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Por último, uno de los más absurdos mitos, es que conocemos todas las drogas, porque el cannabis es la puerta de entrada para ello. Cosa totalmente falsa, no niego que hayan cannabicos que también prueben otras drogas, pero en definitiva, el cannabis es la puerta a una contracultura por la libertad, legalización y despenalización del uso consumo de la marihuana.