El subcontinente latinoamericano, ha evidenciado los avances que en materia de cannabis se ha desarrollado desde la perspectiva política hacia el turismo y la salud así lo demuestra por ejemplo lo propuesto por el ministro de Turismo de México, E. de La Madrid para legalizar el consumo recreativo de la marihuana recreativa en espacios de alta densidad turística cómo lo es Quintana Roo y Baja California Sur. Allí se enfrentan situaciones de pugna por el control del territorio por parte de los carteles. Por ser estos lugares de alta demanda comercial y turística.
Por ello explica el ministro, lo positivo que resulta la legalización de la marihuana para su producción y venta, pues, ello ayuda a que estos destinos turísticos obtengan mayor seguridad para los turistas. Por otro lado, se han venido reuniendo grupos de ciudadanos de distintas nacionalidades (mexicanos-canadienses-estadounidenses) con la intención de abonar esfuerzos para la investigación así como la importación de productos derivados del cannabis con fines medicinales y otros campos (textil, papel, entre otros).
Otro país que ha llevado ciertas acciones en torno a la regularización del cannabis, para su legalización es Paraguay, nación en la que se estableció una ley para reglamentar la marihuana medicinal y a la vez generar un marco legal para el cultivo y uso del cannabis. En esta ley, se emana, que el control estará direccionada por el Estado y no se autoriza el autocultivo.
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Cabe destacar que es Uruguay, el primer país del mundo en legalizar el uso recreativo de la marihuana, incluyendo el autocultivo, de acuerdo a una ley promulgada en 2017. En ese mismo orden de ideas países latinoamericanos como Brasil, Puerto Rico y el propio México desde 2016 han venido otorgando permisología y legalidad al uso medicinal del cannabis, producto de las diversas investigaciones llevadas a cabo y las evidencias encontradas sobre los mismos.
