El Ayuntamiento de Camden está trabajando rápidamente para prohibir que los negocios de cannabis operen dentro de la ciudad, una medida diseñada para dar a los funcionarios más tiempo para elaborar reglas que, en última instancia, permitirán que tales negocios abran allí.
“Es más como una pausa para tener la industria en la ciudad, particularmente para darnos control sobre la industria en Camden”, dijo Nichelle Pace, quien preside un comité ad hoc que recomendará reglas para el mercado de la marihuana recreativa. “Nos da la oportunidad de tener una hoja de ruta y presentar las mejores recomendaciones para políticas y procedimientos”.
Los funcionarios de la ciudad tienen una fecha límite del 22 de agosto como resultado del proyecto de ley firmado por el gobernador Phil Murphy en febrero que otorgó a la Comisión Reguladora del Cannabis el poder de establecer y regular el mercado de la marihuana recreativa en Nueva Jersey. La medida les dio a los municipios seis meses para decidir si permitirían que las empresas de cannabis operaran en sus jurisdicciones bajo las reglas estatales o optar por no participar.
Si un municipio no promulga una ordenanza antes de la fecha límite, entonces cualquier negocio de cannabis que esté autorizado podrá operar bajo las reglas estatales. En ese momento, pasarían cinco años antes de que un municipio pudiera volver a prohibir tales negocios.
“Si no optamos por no participar, simplemente estamos sujetos a las reglas del estado y no tenemos control [sobre] quién viene aquí”, dijo Pace.
Se espera que la ordenanza sea aprobada por el Ayuntamiento. Una resolución relacionada pide al comité ad hoc que proporcione recomendaciones antes del 31 de agosto.
Mientras Camden planeaba estratégicamente darse más tiempo para elaborar reglas, el lunes pasado se presentó un proyecto de ley en la Asamblea estatal que extendería el plazo de “exclusión voluntaria” en 60 días.
Camden no es el primero en considerar una pausa para ver el panorama general, según Mike McQueeny, abogado de Foley-Hoag que consulta a municipios y empresas sobre la industria del cannabis en Nueva Jersey y Nueva York. También es abogado de la Asociación de Comercio de Cannabis de Nueva Jersey.
“Muchas comunidades en todo el estado tienen algún tipo de grupo de trabajo [o comité] de cannabis para estudiar cuál será el impacto en sus comunidades individuales”, dijo McQueeny, y agregó que al implementar una pausa, los municipios perderían los ingresos que las empresas podrían traer.
“Lo primero que hace casi cualquier empresa que busca ingresar a la industria del cannabis es… ir a los profesionales y [preguntar], ‘¿Qué ciudades están abiertas para los negocios?’”, dijo.
El comité de Camden se ha estado reuniendo durante meses. Pace dijo que no se trata solo de marihuana recreativa, y que los miembros han estado observando la industria en ciernes como un todo, no solo la parte recreativa.
“Aún tenemos que asegurarnos de que estamos respondiendo a las necesidades de esos servicios para pacientes en el lado médico”, dijo. “El dispensario más cercano a Camden está a unas 13 millas de distancia en Bellmawr”.
Además de las necesidades médicas, Pace dijo que el comité también está analizando el cáñamo.
“No se trata tanto de cannabis y medicinas, sino de fabricación industrial, productos de construcción, materiales de embalaje”, dijo. “El cáñamo es el mayor generador de ingresos”.
