Una receta muy original que es todo un clásico en la cocina india. Un alimento básico, fácil de preparar, que puedes combinar con cualquier plato aportando un gran sabor.
Ingredientes
- 2 cebollas medianas cortadas en rodajas
- 90g de harina (de garbanzos)
- 1 cucharada de mantequilla de cannabis
- El zumo de ½ limón
- 1 cucharada de cúrcuma (molida)
- ½ cucharada de pimentón dulce (especia)
- 1 cucharada de semillas de comino enteras
- 2 cucharadas de jengibre fresco rallado
- Un poco de sal
- 2 dientes de ajo picados
- 1 cucharada de cannabis en cogollo triturado
- Un poco de aceite para freír (puede ser aceite oliva si se prefiere)
- Agua fría
Preparación
Primero mezclamos la harina con el zumo de limón, la mantequilla fundida y un poco de agua, hasta obtener una masa espesa y suave. A ésta, añadimos las especias, el cannabis, el ajo, el comino y el jengibre. A continuación, añadimos las cebollas a rodajas y las mezclamos bien asegurándonos de que queden bien empapadas por la masa.
-En una sartén, freidora, etc., calentamos el aceite a 180 grados, y cuando esté bien caliente vamos dejando caer cucharaditas de la masa dándole la forma deseada. Lo dejamos flotando en la sartén unos dos minutos por cada lado hasta que estén doraditas y crujientes.
-Es importante controlar la temperatura del aceite para que no se suba más de lo aconsejado; con esta temperatura conseguiremos que el THC no pierda sus propiedades y su efecto sea bastante fuerte.
-Luego escurrimos la cebolla crujiente sobre un papel de cocina y ya estará lista para servir. Se puede servir con alguna salsa, según el gusto de cada uno.
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