Las plantas de marihuana tienen varias fases por las que pasan hasta que sus cogollos puedan ser cosechados, secados, curados y fumados. Cada una de estas fases requiere un trato distinto, como nutrientes específicos u horas de luz específicas.
Nuestra planta favorita tiene cuatro fases principales, las cuales son la germinación, el crecimiento, la floración y el engorde. Hoy hablaremos de la fase de floración en general, por qué ocurre y cuándo ocurre.
Floración
La floración, en términos básicos, es cuando tus plantas de marihuana empiezan a producir flores aromáticas que, con el trato correcto, podrás cosechar, secar, curar y fumar.
Al principio, tus plantas seguirán creciendo a medida que vayan empezando a florecer, pero llegará el momento en que dejarán de crecer para poder concentrar toda esa energía en producir flores grandes y resinosas. De normal, la época de floración suele durar entre 7-9 semanas, aunque algunas variedades sativas pueden tardar bastante más.
¿Cuándo florece?
La marihuana normalmente florece cuando hay un cambio en las horas de luz y oscuridad que reciben. Mucha gente supone que esto ocurre al recibir menos horas de luz, pero realmente depende de las horas de oscuridad que reciben.
Para florecer correctamente, una planta de marihuana de temporada necesita 12 horas ininterrumpidas de oscuridad.
Durante el día (cuando recibe luz) la planta realiza el proceso fotosintético, convirtiendo la luz en energía y soltando oxígeno, cosa que todos sabíamos ya. Por la noche la planta empieza a producir una hormona que se llama florígeno, y es la que se encarga de incitar la floración en la marihuana. Si tus plantas empiezan a recibir más horas de luz ininterrumpida, empezarán a producir más florígeno y por lo tanto se verán obligados a florecer.
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