Se presentó un recurso extraordinario federal para que llegue a la Corte de Justicia el caso de una madre salteña que necesita cultivar marihuana para el tratamiento de su hijo.
“El fallo pone a una madre en la disyuntiva de enfrentarse a una pena de hasta 15 años de prisión, similar a la que puede tener un violador, o que su hijo vuelva a vivir con dolores y todos los síntomas que venía sufriendo”, dijo el abogado Mariano Fusero, especialista en políticas de drogas, sobre la sentencia de la Cámara Federal de Salta que le impide a una madre cultivar cannabis con fines medicinales. Ayer se interpuso un recurso extraordinario federal por el caso.
Fusero es referente de la ONG Reset, que ayer se presentó ante la Justicia como “amicus curiae”, una figura que le permite acercar información, antecedentes y documentos a los jueces para que tomen una decisión definitiva sobre el caso.
En marzo de 2018, el juez federal Julio Bavio había considerado que se le debía permitir a una mujer plantar cannabis en su casa para el tratamiento de su hijo, que sufre una enfermedad que le provoca dolores constantes y convulsiones: neurofibromatosis de tipo 1.
Sin embargo, la Cámara Federal de Apelaciones de Salta dio marcha atrás y revocó la autorización que tenía la mujer. Los jueces Mariana Catalano y Alejandro Augusto Castellanos argumentaron que el Congreso de la Nación debatió recientemente sobre el tema y que, pese a eso, el autocultivo sigue estando prohibido.
En la resolución de la Cámara también se considera que no está probado que el cannabis vaya a resultar beneficioso para el niño.
“Es una avanzada sobre las potestades de la madre de velar por su hijo. Tanto ella como los tres médicos tratantes atestiguan que el cannabis medicinal no le produjo daño sino todo lo contrario, mejoró su calidad de vida. Eso debería ser prueba suficiente”, dijo a El Tribuno Mariano Fusero.
El abogado además destacó que están difundidas las propiedades terapéuticas del cannabis para diferentes dolencias. “No es que la madre está planteando darle pasta base de cocaína al hijo, que sería algo que nos sorprendería a todos”, ejemplificó. “¿Qué haría cualquiera que se encontrara en esta situación de esta madre?”, acotó Fusero.
Guido Giacosa, uno de los dos abogados que representan a la familia del niño, informó que ayer se presentó un recurso extraordinario federal con el objetivo de que la causa llegue a la Corte Suprema de Justicia de la Nación.
El letrado también aseguró que la madre está recibiendo apoyo de la sociedad y a la vez se siente “muy temerosa por la situación de fragilidad a la que quedó expuesta por recurrir a la Justicia” para buscar una salida.
Lesiones en la piel, tumores subcutáneos y dolores intensos que no pudieron ser controlados con medicación analgésica tradicional son algunos de los síntomas que padece el niño.
El juez federal Julio Bavio había hecho lugar a una medida cautelar que impulsaron los abogados de la familia, ante la falta de otras medicaciones con la que pueda tratarse la enfermedad.
Fusero destacó que la madre no tiene una vía legal para acceder al aceite de cannabis que necesita el niño. También cuestionó que la Cámara Federal haya puesto como fundamento el hecho de que “el Congreso rechazó por unanimidad” legalizar el cultivo de cannabis recientemente.
“Realmente me extraña que ese sea el argumento de los camaristas. La Justicia, como poder independiente, puede controlar la constitucionalidad de las normas”, señaló Fusero, también docente y redactor de proyectos de ley sobre legalización del cannabis.
El fallo de la Cámara Federal indicó que el paciente debe ser incluido provisoriamente en un programa nacional que provee aceite de cannabis. El organismo no aceptó hasta ahora la solicitud de ingreso porque solo está destinado a casos de epilepsia. Además, esta institución distribuye una sola variedad y el niño necesita una rotación de cepas para evitar el acostumbramiento.
Vía eltribuno.com
