Degustar de unos buenos dulces es un gran disfrute para hacer la sobremesa, luego de una excelente comida, sea el almuerzo o cena, conversar, comerte un dulce, un vaso de jugo, café o té lo podrás saborear mucho mejor si valoras la gastronomía cannabica. Apúntate, a desarrollar la dulcería y repostería añadiendo efectos psicoactivos para que todos(as) tus invitados(as) se sientan a gusto.
Hoy te comentaré sobre una receta bien rica y fácil de preparar, además sus costes son accesibles. Lo mejor de todo es que puedes conservar estos dulces en la nevera para tenerlos como aperitivos o meriendas para ti y tus amigos (as). Ten en cuenta además, que toda receta tiene siempre su toque personal así que disponte a crear y recrear a partir de los ingredientes que te propongo y los que consideres son más deliciosos para tus comensales. Al mismo tiempo verifica la proporción de cannabis a utilizar, es decir, tu eres el o la cocinera(o) así que decide la cantidad de marihuana a usar en la receta.
La receta que te propongo hoy es la de Dulces Rellenos de Marihuana, con ingredientes para 4 o más comensales:
Ingredientes:
- 100g de Chocolate con leche
- 100g de Chocolate Blanco
- 200g de Leche Condesada
- 250g de Azúcar Glas (opcional)
- 120g de Mantequilla de Marihuana
- 150g de Nubes de golosinas (Esponjas Dulces)
Preparación:
En una olla coloca a fuego lento la mantequilla de marihuana, esta mantequilla la puedes preparar tú en casa, cuando ya esté derretida añade la leche condensada, azúcar, mueve estos ingredientes poco a poco, no los dejes hervir; con ello el THC se preserva y aumenta bañándolos todos con su aroma y sabor. Luego de esto, incorpora a la mezcla el chocolate troceado en pequeños pedazos, además agrega las nubes de golosinas (gomitas, malvaviscos); procura mantener en movimiento los ingredientes hasta que se homogenice por completo la mezcla.
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Usa un molde en el que untarás mantequilla cannabica, para verter el líquido resultante de la mezcla realizada. Para finalizar esta receta fácil, divertida y deliciosa, introduce en la nevera el molde con el líquido después de dejarlo reposar prudencialmente, haciendo que baje el calor de la mezcla. El tiempo que el molde debe estar en la nevera es de 1 a 2 horas o hasta que esté completamente duro para desmoldar y luego cortar en pedazos pequeños. Presenta este rico dulce de mil formas para tus comensales.
