Un nuevo estudio viene a revalidar los resultados de otros estudios anteriores: no existe una relación entre cannabis legal e incremento del crimen. Al menos, a corto plazo.
La Washington State University, Stockton University de New Jersey, y la University of Utah, han realizado un informe conjunto sobre 20 años de casos criminales del FBI. La intención era averiguar si los crímenes violentos habían aumentado debido a la legalización del cannabis. Las conclusiones han sido publicadas en el Justice Quarterly, que, como os podéis imaginar, no es una revista académica de caza y pesca sino sobre jurisprudencia.
La investigación se centró en Colorado y Washington, los dos estados que legalizaron primero el cannabis para uso recreativo. Los datos se compararon con otros 21 estados entre los que están los que prohíben a día de hoy el cannabis.
La conclusión del estudio es que la tasa de crímenes violentos tanto en Colorado y Washington es, de media, igual que la del resto de estados. En Washington se encontró que los asaltos con agresión, robos en viviendas y los crímenes relacionados con la pobreza aumentaron después de la legalización en las urnas, sin embargo, esos datos descendieron a niveles normales cuando abrieron los primeros dispensarios.
“Creo que está bastante clara la evidencia de que, como mínimo, el cielo no se está cayendo”, comenta el profesor asociado Dale W. Willits, co-autor del estudio. “Necesitamos saber a dónde va todo esto. Pero ahora podemos decir que no hay efectos a corto plazo. Y es todo lo que podemos decir con los datos que tenemos. No me sentiría bien si dijese que en 10 años no veremos algún beneficio o coste que no hemos sabido anticipar”.
Fuente: Cáñamo
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