Poco después de la legalización del cannabis en Canadá, ahora los padres están modificando la forma en que hablan con sus hijos acerca de la hierba, ya que la misma se ha convertido en una parte más visible en la vida diaria de todo el país.
Ashleigh Brown, fundadora de SheCann, un grupo de mujeres canadienses que comparte sus experiencias con el cannabis medicinal, dijo que hablar con los niños sobre la marihuana no debería ser una simple conversación, sino un diálogo constante, ya que con esta conversa se pueden definir cualquier confusión a futuro.
“Los niños son inteligentes y están viendo todo. Las conversaciones deben ser sobre autenticidad y honestidad”, explicó Brown a una audiencia en el evento Women & Weed en Toronto, el sábado pasado.
Sin embargo, muchos investigadores afirman que si bien se necesita hacer más investigación sobre los efectos del cannabis, en particular sobre sus efectos en los cerebros que no están completamente desarrollados, dijo que plantear discusiones con los niños sobre ciencia y lógica es lo mejor.
Brown concluyó que los padres nunca pueden garantizar que sus hijos se mantendrán sobrios, pero si se educan sobre los efectos del cannabis, pueden tomar decisiones bien informadas:
“Mi trabajo es ser una consumidora responsable y almacenar
[el cannabis]
de manera responsable y tener estas conversaciones. Quiero dialogar con mis hijos sobre esto”.
En una historia de hogar
Sabine Dolby, de 56 años, comentó que solía esconder el cannabis de sus hijos cuando eran más pequeños, pero ahora que son adultos, de 24 y 30 años, todos fuman juntos. Dolby explicó que no fumaba a menudo cuando sus hijos eran más pequeños y que no les hablaba mucho sobre el cannabis, pero ahora, que es una consumidora habitual y que el cannabis es legal, dijo que está aliviada de no ocultárselos.