Los legisladores de Vermont se están acercando a un acuerdo sobre la implementación de un mercado regulado y con impuestos para la marihuana, superando grandes obstáculos en las negociaciones.
Los legisladores avanzaron mucho en el proyecto de ley antes del fin de semana con la Cámara y el Senado haciendo concesiones en varios puntos clave importantes.
El escollo restante tiene que ver con la forma en que las ciudades ganarán dinero con el nuevo producto. En este momento, la marihuana estará sujeta a un impuesto especial del 14% y un impuesto a las ventas del 6%. Pero a nivel local, los legisladores aún están analizando los detalles. El Senado quiere imponer un impuesto del 2% a las ciudades que albergan dispensarios, pero la Cámara quiere dar a las ciudades dinero de las tarifas de licencia de marihuana.
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En las negociaciones, se eliminaron varias disposiciones controvertidas, como una disposición que establece que no usar el cinturón de seguridad es un delito principal. Los legisladores también descartaron una propuesta que provocó la ira de algunos, una disposición que declara ilegal tener alcohol o marihuana, incluso si está en un recipiente sellado, en el asiento delantero o trasero.
Los legisladores también eliminaron lo que anteriormente era un gran obstáculo para el proyecto de ley, las pruebas de saliva. La Cámara y el Senado acordaron permitir que la policía administre pruebas de saliva en las carreteras si tienen una orden judicial. Pero la prueba de saliva en la carretera sigue siendo una preocupación para muchos porque solo identifica la presencia de THC, no si alguien está afectado.
Los negociadores se reunirán a finales de esta semana y seguirán trabajando en los detalles del proyecto de ley.