El cannabis de hoy puede ser un bálsamo para casi cualquier cosa, desde calambres hasta menopausia, migrañas y más.
La mayoría de todas las mujeres son aspirantes perfectas para interactuar en este mercado, pues ahora es más probable que ellas vaporicen cannabis o beban infusiones de marihuana. Además, la mujer se está vinculando con el cannabis para relajarse, maquillarse, aliviar algún padecimiento, encenderse sexualmente o ponerse a trabajar. El principal objetivo puede ser el dinero o la convergencia armónica, ya que ahora es posible lograr ambos simultáneamente.
“Se trata de vivir una buena vida, en lugar de sólo vivir la euforia [psicoactiva]”, comenta Kate Miller, cofundadora y directora de Miss Grass, una publicación en línea que trata sobre las mujeres modernas.
La cultura del cannabis se teje en muchos aspectos de nuestras vidas, desde la salud al trabajo, desde la belleza hasta la comida. Las mujeres se sienten atraídas por la emergente industria del cannabis porque les permite lanzar negocios que combinan el comercio con el cuidado personal.
Las palabras de moda de la nueva cultura del marketing de la marihuana son “bienestar”, “curación” e incluso “belleza”. Sumadas, sin importar el orden de los factores, significan “grandes cantidades de dinero”. Los productos de cannabidiol (o CBD), el compuesto antiinflamatorio no psicotrópico de cannabis, es lo que más atrae a las damas de hoy como bálsamo para casi cualquier cosa femenina: calambres de menstruación, estados de ánimo de la menopausia y migrañas; incluso como estimulante sexual. La dueña de un negocio de cannabis que prefirió que su nombre no se mencionara, admite que fue atraída por el efecto secundario sexual.
“Para mí, el THC y el CBD crean el Viagra femenino, aumentando los sentidos, ayudándote a entrar en tu cuerpo”, manifestó.