Existen muchas explicaciones posibles para esta situación. Sin embargo, por antiguo y anecdótico que resulte este hecho, existe muy poca investigación sobre cómo la música y la marihuana realmente interactúan en el cerebro para producir experiencias tan profundas. Sin embargo, abundan las teorías.
Según un estudio científico realizado en el año 2012, cuando los participantes en un ensayo consumieron cannabis y escucharon música, pudieron recordar mejor las letras, entender las diferencias en los sonidos y otros matices que componen las piezas musicales y hacen que los ritmos suenen mejor.
Algunos incluso afirmaron que las líneas entre los sentidos visual y auditivo se volvían borrosas y causaban una sensación conocida como sinestesia, la sensación de un sentido que se corresponde con otro.
Alivia el estrés y hacen fluir la dopamina
La llamada hormona de la felicidad. Mientras relaja el cuerpo y la mente, abre los canales que permiten apreciar la música a un nivel más profundo.
Cuando no estás preocupado por los factores estresantes del día a día, puedes concentrarte mejor en el mensaje, así como en la melodía, el ritmo y otras sensaciones presentes en el tema musical.
Al final, realmente no importa por qué la marihuana hace que la música suene mejor. Lo que importa es que lo hace.
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