Según informes de noticias, la legislatura de Vermont está lista para adelantar el S54 este mes o el próximo, para legalizar el cultivo y la venta de marihuana en el estado a partir de 2022. Ambas cámaras han aprobado versiones del proyecto de ley.
La situación regulatoria actual en Vermont es única, ya que la posesión de marihuana es legal desde enero de 2018. Antes de dirigirse al gobernador para su firma, las dos cámaras tendrán que resolver sus diferencias en el comité bicameral.
Según la versión de la Cámara, se impondría una tasa de impuesto especial del 14 por ciento del valor minorista (y el impuesto general a las ventas del 6 por ciento del estado), mientras que la versión del Senado impondría una tasa del 16 por ciento y permitiría una opción local del 2 por ciento. Según el proyecto de ley del Senado, la marihuana recreativa estaría exenta del impuesto general sobre las ventas.
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En particular, la propuesta del Senado también prohibiría las flores con más del 30 por ciento de THC y los sólidos que contienen más del 60 por ciento de THC. Eso convertiría a Vermont en el único estado en prohibir productos que excedan ciertos niveles de THC.
Si se aprueba el S54, Vermont seguiría la tendencia de gravar la marihuana por precio minorista.
Aunque esta puede ser la opción más simple y popular, no es la ideal. Un diseño de impuesto especial basado en principios que capture mejor la externalidad se basaría en una combinación de potencia y peso. Aunque esto introduce complejidad en el diseño fiscal, hace que el impuesto sea más equitativo.