Cuando se habla de Cannabis en América Latina, inmediatamente se refiere el tema de la prohibición, ya que en muchos de los países que conforman este subcontinente poseen en sus leyes penalización e ilegalización del cannabis. Es decir la prohibición, de la planta en todas sus formas: cultivos, usos, distribución y venta. Sin embargo, se ha venido desarrollando un debate interesante en diversos congresos y mesas de trabajo, para la puesta en marcha de una regularización de la marihuana para su procesamiento industrial, médico, científico en países como Colombia, Brasil, Ecuador, Chile, Paraguay, Uruguay –país en el que en 2017 se legalizó y despenalizó el cannabis de manera total-.
Sin embargo, aún se mantiene la prohibición y estigmatización de esta planta, ello sobre todo obedece al desconocimiento por parte de la sociedad en general e incluso de los propios legisladores y cuerpos de seguridad al respecto de los beneficios que se pueden obtener para múltiples ámbitos a través del cannabis. Es decir la falta de información o más bien el despliegue de una información sesgada que alimenta la prohibición y la estigmatización es lo que ha venido dominando en países de América Latina.
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En este sentido, se generan canales comunicativos a través de grupos, movimientos, colectivos e individualidades de los campos médicos-científicos, culturales, entre otros para la desmitificación del cannabis y enterar a la gente cada vez más sobre los beneficios de la planta y propiciar el aprovechamiento de la misma en cuanto su cultivo, procesamiento, distribución y comercialización del cannabis y sus derivados. Por ello, es posible ir generando a través de la información y comunicación, una mejor opinión sobre el cannabis en la actualidad.
