Dejar de fumar es una preocupación para muchas personas adictas. Investigaciones recientes están demostrando la eficacia de nuevos para acabar con ello.
Un primer estudio realizados por la University College de Londres, facilitó a doce personas adictas al tabaco un inhalador de CBD y a otras doce uno con una sustancia placebo. Ambos grupos debían utilizarlo cuando sintieran ganas de fumar.
El resultado fue que los que utilizaron el inhalador con CBD redujeron su consumo de cigarrillos en un 40 %, mientras que los que usaron el placebo no obtuvieron un resultado significativo.
Los investigadores señalaron que era posible que los medicamentos con compuestos alteradores del sistema endocannabinoide resultaran útiles en la lucha contra la nicotina
Segundo Estudio
En un segundo estudio participaron 30 fumadores con dependencia a la nicotina. Se les administró 800 mg de una sustancia que podía ser CDB o un placebo compatible.
Tras ello, los participantes observaron señales pictóricas de tabaco y se les examinó para encontrar efectos en abstinencia, antojos, frecuencia cardíaca y presión arterial, es decir, señales físicas vinculadas al deseo o la necesidad de fumar.
El resultado mostró que, en comparación con el grupo de placebo, una dosis única de 800 mg de CBD podría ayudar a reducir la atracción al tabaco generada, especialmente cuando los participantes se abstuvieron de fumar cigarrillos durante la noche. Con este estudio se reforzaba el resultado de la investigación de 2013.
Contra la adicción
Para dejar de fumar no basta con superar la adicción física, sino que hay que luchar contra un hábito. Para muchas personas, fumar está muy asociado a tomar una copa o un café, o a una reunión entre amigos.
Por tanto, dejar esta adicción resulta muy complicado y puede generar estrés y ansiedad entre los que intentan escapar. Sin embargo, estos efectos pueden aplacarse fumando cigarrillos de flores de cáñamo con CBD, lo que permite alejarse con rapidez de la adicción a la nicotina sin tener que renunciar al hábito adquirido.
Existen métodos menos perjudiciales, ya que el humo siempre es susceptible de ser cancerígeno. Por tanto, si bien es útil para abandonar el tabaco de forma progresiva, lo más saludable será optar por el vapeo, el aceite o los chicles.
Te sugerimos: El cannabis combate y previene el cáncer de mama