La Organización Mundial de la Salud (OMS) publicó un informe de 27 páginas sobre el CBD, donde resaltan que no es peligroso ni adictivo. Aunque los consumidores ya lo sabían, este tipo de respaldo a gran escala no tiene precedentes.
Dicho informe, analiza solamente el cannabidiol (CBD), representa un gran paso para desmentir antiguos conceptos erróneos sobre este cannabinoide.
La Organización Mundial de la Salud es un organismo de las Naciones Unidas en el que confían países de todo el mundo. Por eso, este informe es fundamental para la imagen del CBD de ahora en adelante
¿QUÉ ES EL CBD?
Es el segundo cannabinoide más abundante en la planta de la marihuana y es un componente que no produce efectos psicoactivos. Por este motivo, presenta más aplicaciones médicas potenciales que el THC, el principal componente psicoactivo del cannabis.
El CBD es el cannabinoide predominante, por lo que el aceite de CBD suele extraerse del cáñamo orgánico. Para preparar CBD seguro para el consumo, se utilizan técnicas de extracción con CO₂ para evitar subproductos tóxicos de solventes como el butano.
BENEFICIOS
Ayuda a retener la hidratación de la piel y a combatir síntomas de afecciones cutáneas como el acné y el eccema. Este mecanismo beneficioso se debe básicamente a las conocidas propiedades antiinflamatorias del CBD.
Aunque el CBD no produzca efectos psicoactivos, tiene el potencial de ofrecer relajación a quienes sufren de ansiedad e incluso depresión. En varias publicaciones se ha afirmado que el CBD es eficaz tanto de manera individual como en conjunto con el THC y otros compuestos de la planta.
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INFORME DE LA OMS
Expertos en Farmacodependencia resume la información de la siguiente manera: “La evidencia actual también demuestra que es improbable que el cannabidiol produzca dependencia o adicción como otros cannabinoides (como el tetrahidrocannabinol [THC], por ejemplo)”.
Si bien el cannabis no contiene compuestos químicamente adictivos, el efecto producido por el THC puede asociarse de manera cognitiva al placer, que, a su vez, puede producir una forma de dependencia o adicción psicológica.