El Virus de Inmunodeficiencia Humana puede originar el Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida a través de la trasmisión sexual, sangre o fluidos contaminados y suele ser una enfermedad crónica que suprime los sistemas funcionales de las personas.

El VIH es una dolencia que posee una alta tasa de letalidad, donde los enfermos tienen una alta probabilidad de morir, nacional e internacionalmente comprobado. Tiende a estar presente en algunos años o durante la vida del individuo, lo que marca su estadía en este mundo y la existencia de su familia, además de las relaciones y el convivir con la sociedad.
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Amerita que se realicen exámenes de control y monitoreo para revisar las condiciones actuales y futuras. Además, que esta patología amerita un tratamiento contra el virus de manera prolongada.
Este virus es parte de las epidemias más peligrosas en la salud de una nación y del mundo entero, que produce limitaciones y alteraciones en todos los niveles sociales. No respeta condiciones ni estatus y por su cronicidad hace que los usuarios busquen otras alternativas.
La medicina natural ofrece a la marihuana medicinal como una opción para que minimice la cerebritis que puede producirse a través de THC y CB2 que son componentes importantes presentes en la planta y que causan efectos positivos importantes. Disminuye la neuroinflamación y hace que no se replique el virus, limitando el daño.
Los componentes del cannabis CB2 reaccionan con los receptores de estas células, suprimiendo el virus y previne que avance a fases más mortales. El THC hace que en todo caso de presentarse se quede en VIH y se concentre hasta no avanzar a SIDA.