El cannabis cada vez más integrado dentro de nuestra cultura, donde cada día se hacen más visible los muchos beneficios de los cannabinoides, como el THC o el CBD, no deja de sorprendernos mejorando la vida de los diabéticos y su función metabólica.
Incluso quienes se dedican a su uso recreativo moderado nos relatan sus increíbles beneficios del consumo diario de esta planta, el cannabis y el ejercicio parecen ir de la mano si lo que está buscando es mejorar su salud física. Ahora parece ir un paso más allá con los nuevos estudios donde las propiedades del cannabis nos ayudan a neutralizar las células de grasa.
Centrándonos en el tema, la insulina es una hormona producida por el páncreas que permite a su cuerpo usar el azúcar (glucosa) de los carbohidratos en los alimentos que usted come para generar energía o almacenar la glucosa para su futuro uso.
La insulina ayuda a mantener su nivel de azúcar en sangre, evitando que se vuelva demasiado alta o demasiado baja, lo que podríamos comparar con más o menos acierto con un “termostato” que en vez de temperatura lo hace con el azúcar.
Un estudio publicado en el American Journal of Medicine encontró que los consumidores regulares de cannabis tienen la insulina en ayunas (insulina en su cuerpo antes de comer) a niveles 16% más bajos que los no consumidores.
El estudio también encontró que los consumidores de cannabis tenían niveles de resistencia a la insulina 17% más bajos y circunferencias de cintura dentro de la media.
La marihuana combate las células de grasa
Los investigadores llegaron a la conclusión de que había una asociación significativa entre el uso de la marihuana y la circunferencia de la cintura más pequeñas, llegando a certificar medidas muy similares ente sí.
Otro estudio epidemiológico en 2013 mostró que las tasas de obesidad son significativamente más bajas para todos los grupos de consumidores de cannabis (inclusive de género y edad) en comparación con aquellos que no habían consumido cannabis en los últimos 12 meses.
El menor índice de masa corporal (IMC) de los fumadores de marihuana puede explicarse por una adaptación bajo regulación de la señalización endocannabinoide cerebral.
Mientras el THC estimula el apetito, la estimulación repetida de los receptores CB1 por el THC disminuye la expresión del receptor, la sensibilidad, y la estimulación del apetito.
Fuente: Mundo Cannábico
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